Vacaciones en coche: consejos para un viaje seguro
La ciudad queda a tu espalda y delante de ti tienes largos días de vacaciones bien merecidas. Pueblos escondidos, calas secretas, rincones inesperados donde parar a hacer un picnic y echar una siesta… Las vacaciones en coche son la mejor manera de explorar a tu aire y dejar atrás la rutina. Para disfrutar al máximo de la libertad de estos días maravillosos, comprueba antes de salir el estado de tu coche y planifica tu viaje para evitar sorpresas.
Revísalo frecuentemente
Nada puede estropear tanto las vacaciones como una avería inesperada que te haga tener que lidiar con un taller desconocido, y más si estás en el extranjero. Asegúrate de que el coche ha pasado todas las revisiones y de que no tienes citas de mantenimiento pendientes. Aunque todo esté en regla, dedica un rato a revisar estos aspectos antes de salir:
- Neumáticos.
Inspecciona con cuidado todas las ruedas sin olvidarte de la de repuesto. Fíjate en si hay grietas o abolladuras y en si la superficie está desgastada de forma irregular y comprueba la banda de rodadura y la presión. La ley exige que el dibujo de la banda tenga una profundidad mínima de 1,6mm, pero los expertos recomiendan que esta sea de entre 3mm en verano y 4mm en invierno para extremar la seguridad.
Para comprobar el estado de los surcos basta con que te fijes en los indicadores de desgaste que llevan todos los neumáticos y que consisten en unos resaltes del dibujo que están sobre la base de los canales. Si la banda llega a la altura de los testigos, es el momento de cambiar la rueda.
Además, existe un truco muy sencillo para saber si el surco tiene los 3mm de seguridad. ¿Sabes cuánto mide el borde dorado de las monedas de euro? Pues exactamente 3mm. Introduce una moneda en el surco del neumático y si la parte dorada desaparece, ya sabes que puedes coger el volante con seguridad.
Otro aspecto al que hay que prestar atención es la presión. Los neumáticos con una presión baja tienen menos agarre, se desgastan antes y hacen que aumente la distancia del frenado. Para saber cuál es la presión óptima puedes acudir al manual del vehículo, aunque la mayoría de los coches incorporan sensores de control de la presión (TPMS) que te avisan si hay que un error. Si vas a pasar unas vacaciones en coche, te recomendamos que dejes la revisión de la presión para el día de la salida y lo hagas con el vehículo ya cargado (pasajeros incluidos). El sobrepeso del equipaje aumenta la carga sobre los neumáticos y cambia la presión de los mismos. - Lunas y limpiaparabrisas.
Aprovecha la limpieza del parabrisas y revísalo con cuidado para buscar posibles impactos o grietas. Aquí también puedes utilizar una moneda para hacer una comprobación rápida. Si el diámetro del impacto es menor al de una moneda de dos euros, no hace falta que cambies la luna. Pero llévala al taller lo antes posible para solucionar el problema y evitar que pase a mayores. Además de garantizar la seguridad del vehículo, evitarás tener que reemplazar toda la pieza más adelante y gastar mucho más dinero.
Comprueba también el estado de los limpiaparabrisas para asegurarte de que cumplen correctamente con su función. Fíjate en si las escobillas barren completamente toda la superficie y dejan el cristal limpio y sin marcas. Si no las has cambiado en un año, este es un buen momento para hacerlo. Por último, comprueba el depósito del agua para ver si está lleno y piensa en añadirle productos adicionales (como descongelantes o repelentes al agua) si crees que los vas a necesitar en tu viaje. - Luces.
La intensidad de las luces disminuye con el tiempo, por lo que se recomienda cambiarlas cada 40.000km o cada dos años. Además, es necesario mantenerlas siempre limpias y, en el caso de cambiarlas, hacerlo de dos en dos, ya que se utilizan de forma simétrica. Comprueba que todas las luces funcionan perfectamente, desde los intermitentes hasta las luces de freno o los antinieblas, y no olvides las luces interiores. Aunque hace ya tiempo que no es obligatorio llevar lámparas de repuesto, sí que es necesario que la iluminación esté en condiciones perfectas, así que si detectas algún error debes corregirlo inmediatamente, aunque sea durante el viaje.
Mantenimiento en el taller
Hay una serie de comprobaciones que solo pueden hacerse en el taller. Aunque la mayoría de los vehículos tienen incorporados sistemas de seguridad que avisan de posibles errores del motor o de fallos en los niveles de líquidos, no está de más pasarse por el servicio técnico y solicitar una revisión del sistema de suspensión, el aceite, los filtros y los frenos. Pide que te revisen las zapatas, las pastillas, los discos y el líquido de frenos y no te olvides de echar también un vistazo a los amortiguadores, porque si estos funcionan mal pueden aumentar la distancia de frenado hasta en un 35%.
Ahórrate preocupaciones y alquila un coche
Si no tienes tiempo para llevar a cabo todas estas comprobaciones y revisiones o si no estás seguro de que tu vehículo esté 100 % preparado para disfrutar de unas vacaciones en coche, una opción muy cómoda es alquilarlo. Con el servicio de Volkswagen Rent-a-Car tienes la garantía de conducir un coche nuevo y completamente fiable, con un seguro en regla y la posibilidad de añadir un segundo conductor al contrato. Elige el vehículo que quieras, añádele GPS, sillas para niños o elementos de sujeción de carga si los necesitas y sal a la carretera a disfrutar. De la seguridad nos ocupamos nosotros.
